Con el debate de
los deberes, si hay que mandarlos y hacerlos o no, que no sólo está presente durante el curso, sino también en verano. No debemos pretender que tengan un horario y unas responsabilidades, de estudio, como durante el curso, ya que debemos de ser conscientes que hay otros métodos para seguir aprendiendo y enriqueciéndose, siendo el verano el momento ideal para realizar actividades diferentes a las que se han ido realizando durante el curso académico, y mantener así, el hábito de trabajo, ya que no es bueno que estén todo el verano sin realizar ninguna actividad mental, por lo que la lectura y los juegos de lógica, por ejemplo, son ideales para que sigan trabajando.
¿Cuándo? Hay que buscar un momento al día en el que estén descansados y no tengan distracciones, por ejemplo, después de desayunar y antes de ir a la piscina, playa o con los amigos, después de comer y antes de salir a jugar,…, el momento que ellos prefieran, pero intentando que siempre sea a la misma hora, siendo lo ideal el tener un horario, con, por ejemplo, 40-45 minutos de trabajo por la mañana y/o la tarde, y Lunes, Miércoles y Viernes: Lectura y escritura/ Martes y Jueves: Números y operaciones; o por las mañanas lectura y escritura y por las tardes matemáticas, operaciones,…; o por tareas: leer tres hojas y resumir o dictado y corregir las faltas, y 3 operaciones de cada, además de un problema.
Con las matemáticas pueden hacer tres operaciones de cada (suma, resta, multiplicación y división), si las hace bien cambiamos de actividad, si no, hace una más de la que ha fallado, ya que no se trata de la cantidad que hagan de cada operación, sino de la calidad, porque seguramente, a la decima resta llevando se equivocara, y al final sólo vera el fallo y no las demás que estaban bien, por eso es mejor hacer pocas pero diarias, y estar seguros de tener la técnica y el dominio de cada operación, que muchas durante un día y luego estar varios sin hacer ninguna.
De la lectura, que lo podemos dividir por páginas, 3, o por capítulos, según sea el libro de nuestr@s hij@s, luego pueden hacer un dictado de lo leído, un resumen, inventar otro final,…, y con las faltas que cometan, es conveniente que el niño o la niña las corrija, ya no sólo copiándolas las veces que consideremos necesarias, que también puede ser que no la copien ninguna, sino también escribiendo esa palabra en una oración de manera adecuada y coherente, porque de este modo nos aseguramos que luego la sepa utilizar adecuadamente.
Si son mayores, también es conveniente ir trabajando los esquemas y resúmenes, por lo que podemos coger algún tema de ciencias naturales, sociales, castellano,…, e ir trabajando, para que cuando empiece el curso siguiente, pueda hacer con cierta facilidad y de manera adecuada, ya que habrá seguido practicando durante el verano.
También puede ser divertido el hacer un diario del verano, donde no sólo se cuente lo que ha pasado, sino también pueden pegar las entradas del cine, dibujar lo que ha pasado ese día, el mapa del viaje que se ha hecho en verano, una foto de la playa,….
¿Dónde? Hay que buscar un lugar adecuado, lejos de ruidos, televisión, distracciones,…., preparando el material necesario antes de empezar, teniendo varios lápices a mano, por si uno se cae, se queda sin punta,…, lo mismo de las gomas, los colores, un vaso de agua,…, todos los libros y libretas necesarias. De este modo evitamos que pierdan tiempo luego en buscar cada elemento necesario.
Con estas pauta
s para que llevéis los deberes lo mejor que se pueda, sólo me queda desearos feliz verano, y recordaros que lo importante es que aprendan divirtiéndose y a vuestro lado, y que si necesitáis cualquier cosa, cualquier duda que queráis resolver, no dudéis en contactar con Ensenya´m.